.png)
Autor: Ángel Massiris Cabeza
(Ver perfil académico)
(Ver página web)
Correo: massiris@gmail.com
Colaboradores: Pedro Ricardo Rodríguez; Eugenio Gil Gil, Enrique Luis Muñoz Vélez y Jame Andrés Monsalve.
INTRODUCCIÓN
Con este nuevo artículo de investigación, aspiro a incorporar a la historia documentada de la música de acordeón del Caribe colombiano, una página ausente en la literatura que se ha escrito sobre nuestra música y en la memoria colectiva. El esfuerzo realizado se ha concentrado en la articulación, contextualización y ordenamiento en el tiempo y en el espacio de los hechos musicales protagonizados por cuatro hermanos nacidos Bogotá, de padres ibaguereños; formados musicalmente, en sus inicios, en Sincelejo, proyectados nacional e internacionalmente en Bogotá y mundializados en Nueva York. Niños con un talento artístico prodigioso, integrantes, en sus inicios, de un conjunto de música de acordeón conformado en Sincelejo, en el año 1955, cuando apenas el menor tenía tres años y el mayor doce.
En tan solo seis años (1955-1960), estos niños conquistaron el territorio nacional, Sudamérica, Centroamérica y Norteamérica con sus porros, cumbias, guarachas, paseos y merengues interpretados en acordeón; para pasar luego a una etapa de transición (1961-1964) en la que el concepto musical y artístico transita hacia músicas más universales como pop rock y el twist introduciendo cambios sustanciales en la organología de la agrupación; y a una tercera etapa (1965-1975) en el que adoptan un formato musical y artístico al estilo The Beatles. En esta última etapa se lanzan a la conquista de Europa y el Norte de África con un concepto musical distante de la música de acordeón de su primera etapa.
En sus presentaciones públicas de la primera etapa, se observan elementos propios de modernización en la interpretación de la música de acordeón. Richard, el acordeonista, rápidamente pasa del acordeón diatónico al acordeón cromático y al acordeón a piano, y por primera vez se incorpora en la música de acordeón del Caribe colombiano shows que incluyen formas de vestir con uniformes llamativos, coreografías, solos de instrumentos, baile escénico y nuevos instrumentos musicales que rompían con los cánones tradicionales de la interpretación de la música de acordeón en los años cincuenta. En la segunda etapa fueron protagonistas del nacimiento del Rock colombiano y se incorporaron a la ola del Pop rock, el Rock and roll, el Gogo y el Twist. En su intensa actividad artística, fueron nombrados por el Presidente Gustavo Rojas Pinilla como embajadores culturales del país, recibieron pasaporte diplomático y obtuvieron acreditación como embajadores culturales de Naciones Unidas. Asimismo, fueron invitados a presentarse, en Nueva York, en el año 1960, en el Show televisivo de Ed Sullivan, ante 12 millones de espectadores, los únicos colombianos en lograr esta hazaña; asimismo, fueron recibidos por gobernantes de distintos países y homenajeados por doquier.
Después de su inicio artístico en Sincelejo, se trasladaron a Bogotá desde donde comenzaron sus giras internacionales por las tres américas. Posteriormente, se residenciaron en Nueva York, desde donde realizaron giras por Europa y el Norte de África. Hacia 1969 ya eran una banda internacional y cantaban en italiano, inglés, francés, hebreo y español.
Se trata, sin duda, de una historia sorprendente por el talento prodigioso de estos niños quienes con su acordeón, guacharaca, timba y bongó lograron encantar a auditorios de distintas culturas. Los invito a leer esta fascinante historia que presento con su respectiva documentación de soporte. Mientras van leyendo irán viendo fotografías, noticias de prensa, marbetes de discos, videos y escuchando audios de canciones destacadas.
Expreso mi agradecimiento al maestro Ismael Rudas Mieles por su valioso apoyo en la asesoría y en el análisis de la estructura rítmica y organología presente en las canciones que fueron sometidas a su observación; a Pedro Ricardo Rodríguez y Jaime Andrés Monsalve por su contribución con marbetes y piezas musicales grabadas por Los Hermanitos Ferreira en Nueva York y Argentina desconocidas hasta hoy y por sus observaciones críticas al texto; a Eugenio Gil Gil y Enrique Luis Muñoz Vélez por su colaboración en la revisión del texto y sus comentarios esclarecedores.
Al final del texto existe la opción para que los lectores puedan hacerme saber sus comentarios, aportes y observaciones críticas, que permitan mejorar el contenido.
Los Hermanitos Ferreira fue una agrupación musical colombiana integrada por cuatro hermanos: Richard, Luis Carlos, Álvaro y Néstor Alfonso (Kico), miembros de una familia de siete hermanos (seis varones), nacidos del matrimonio de Mariela Pinto y Luis Carlos Ferreira, un ebanista nacido en Ibagué. Los cuatro hermanos nacieron en Bogotá, así: Richard el 6 de enero del año 1943; Luis Carlos el 27 de abril de 1944; Álvaro el 1 de enero de 1946 y Kico el 12 de octubre de 1952 (Ferreira, Álvaro: 2024). Desde Bogotá se trasladaron a Montería a finales de 1953, ciudad donde estuvieron un poco menos de un año. De allí partieron hacia Sincelejo, adonde arribaron a finales de 1954, cuando Richard apenas cumplía los 11 años (Ferreira, Luis Carlos: 2024). Fue en esta última ciudad donde los niños comenzaron a sentir el influjo de la música de acordeón, que en la primera mitad de los años cincuenta era impulsada en el Caribe colombiano por acordeonistas, tales como Abel Antonio Villa, Alejandro Durán, Ángel Vásquez, Aníbal Velásquez, Fortunato Chadid, José María Peñaranda, Geño Gil y Luis Enrique Martínez, entre otros.
A finales del año 1954, en el ambiente musical sabanero de cumbias, porros, guarachas, paseos, merengues y otros innumerables ritmos; el niño Richard recibe de sus padres como regalo navideño un acordeón. Se trató de un acordeón diatónico de tres hileras con el que comenzó a explorar los ritmos sabaneros que escuchaba por Radio Sincelejo y otras emisoras. Su rápido aprendizaje fue un primer indicador de su talento prodigioso para interpretar con el acordeón cualquier género o ritmo musical. Rápidamente empezó a enseñar a sus tres hermanitos a tocar otros instrumentos para que lo acompañaran en la ejecución del acordeón. Inicialmente utilizaron cacerolas y sartenes de la cocina, mientras Richard construía instrumentos de percusión utilizando materiales del taller de carpintería de su padre: una guacharaca para Carlos, un bongó para Álvaro y una timba para Néstor Alfonso (Kico) quien aún no había cumplido los cuatro años (Ferreira Pinto, 2024) (Imagen 1).
A mediados del año 1956, comienza don Luis Carlos a gestionar las presentaciones de Los Hermanitos Ferreira en los programas musicales de las estaciones radiales de Bogotá, consciente de que ello le daría una proyección nacional a la agrupación. La primera de las emisoras a la que acudió fue a Nueva Granada, donde fueron inicialmente rechazados, sin embargo, realizaron una corta exhibición no autorizada en las oficinas mismas de la emisora con el acordeón, bongó, timba y guacharaca lo que cambió la negativa inicial (Periódico Pantalla, 1959). Rápidamente, comenzaron a hacerse famosos en Bogotá, a tal punto que a finales de diciembre de ese año fueron contratados para presentarse varios días en la Plaza de Toros de Santamaría, como parte de un programa taurino musical en el que participaban distintas estrellas del mundo del toreo y de la música popular, tal como lo testimonian los avisos publicados en el periódico El Tiempo los días 7 y 8 de diciembre de 1956 (Imagen 3).
En 1958, el renombre de la agrupación ya había trascendido las fronteras de Colombia. En ese año emprenden su primera gira internacional llevando consigo su repertorio de cumbias, porros, guarachas y paseos. El primer país visitado fue Ecuador, luego Perú, después Bolivia, desde donde viajaron a Chile (Sonolux, 1960). El periódico peruano "Ultima hora", destacó la llegada de los niños a Lima y su papel como embajadores culturales de Naciones Unidas, acreditación que se les había sido otorgada. En Chile sus presentaciones fueron tan impactantes que, para el espectáculo de cierre, realizado el 10 de julio de 1958, recibieron un homenaje de prestigiosas figuras del ambiente artístico chileno, tal como se lee en la noticia aparecida en el Diario La Nación de ese país (Imagen 5). También se encontraron registros de la presentación de la agrupación en el salón Goyescas de Santiago de Chile (Imagen 6) y en Lima, Perú (Imagen 6a).
Como resultado de dicho éxito, empresarios mexicanos contrataron presentaciones de la agrupación en teatros, radio y televisión de México (Sonolux, 1960). En dicho país actuaron junto a artistas célebres como Viruta y Capulina, Cristian Martel, Irma Dorantes, Palillo y Mandel y Girol Olvera (Periódico Pantalla, 1959); así como con Luis Aguilar y el Trío los Panchos. Según noticias de prensa, Álvaro, el bongosero de la agrupación, con apenas 12 años, “desafió a un duelo al bongó al ídolo Miguelito Valdés, espectáculo que oyeron y vieron pasmados los radio-escuchas y televidentes mexicanos” (Periódico Pantalla, 1959). El éxito de la agrupación en la radio y televisión mexicana fue tan notorio, que fueron contratados para participar en la película ¡Concierto! al lado de Rosita Quintana (Periódico Pantalla, 1959). De esta estancia en México quedaron algunas fotografías como las que se observan en la Imagen 7. Desde México se trasladaron a Puerto Rico, donde fueron presentados en todos los canales nacionales de televisión y finalmente llegaron a Nueva York, donde la agrupación comienza su proyección artística mundial.
La canción Chupa flor es una versión de la clásica composición de José Barros, que aparece grabada con varios nombres: El picaflor, Te llevo a Magangué, Me voy pa´ Magangué y El chupaflor. En el marbete del disco grabado por Los Hermanitos Ferreira, aparece registrada en ritmo de porro, en tanto que El gavilán aparece como merecumbé. En los Audio 2 y 3 se puede escuchar la interpretación de estas dos canciones gracias al generoso aporte del coleccionista Pedro Ricardo Rodríguez.
El análisis de apreciación musical realizado por el maestro Ismael Rudas Mieles a las tres canciones con audio, permitió saber que fueron interpretadas en un formato instrumental que incluye acordeón diatónico, guitarra, timba, bongó, bajo y guacharaca; con un estilo que denota una clara influencia de la música sabanera y cubana.
Grabaciones en el sello Tropical
En 1959, el sello colombiano Tropical se interesó en grabar algunas canciones de la agrupación, de las cuales se documentó en esta investigación un disco que incluye por un lado la cumbia titulada La segunda, de autoría de Richard Ferreira y por el otro La guabina chiquinquireña (Tropical 5683). Estas canciones fueron, posteriormente incluidas en un LP de varios artistas (Imagen 11) (Audio 5).
Grabaciones en Sonolux
También el sello Sonolux aprovechando la estancia en el país de Los Hermanitos Ferreira, se interesó en grabarles canciones, para lo cual firmaron con ellos un contrato de exclusividad del que surgió rápidamente un disco de larga duración titulado Cumbia del mar, que incluye 12 piezas musicales (Imagen 12).
Un análisis especial requiere la canción Los patitos, una pieza de carácter infantil, en ritmo de vals, en la que el maestro Rudas observa un cambio radical en la instrumentación, al utilizarse solamente un acordeón cromático de 48 bajos, guitarra y bajo. El uso del acordeón cromático en esta canción otorga al joven acordeonista Richard Ferreira, el privilegio de ser pionero del uso de este instrumento en la música de acordeón del Caribe colombiano; quien, además, también utilizó en sus grabaciones y presentaciones públicas acordeón a piano, siendo un talentoso acordeonista, quien con las habilidades de sus tres hermanos y las gestiones de su padre como manager, llevaron los ritmos de la música de acordeón del Caribe colombiano por todo el continente americano a finales de los años cincuenta. En la Imagen 13 se pueden observar fotografías en los que Richard aparece con los distintos tipos de acordeón que ejecutó en sus grabaciones y/o presentaciones públicas durante su vida artística y en el Audio 9 el lector podrá escuchar la interpretación de Los Patitos.
El año 1960 constituye un hito en la internacionalización de la música de acordeón del Caribe colombiano y en la consagración de Los Hermanitos Ferreira como agrupación musical. Ese año fueron invitados a presentarse en el Show de Ed Sullivan, un programa de televisión de entretenimiento, cuya emisión promedio, según Monsalve (2021), superaba los doce millones de espectadores en Estados Unidos. El programa se transmitía por el canal CBS en el horario estelar de las 8 de la noche, con la dirección de Edward Vincent "Ed" Sullivan; un popular presentador de televisión a quien en las décadas de los años cincuenta y sesenta denominaban “fabricante de estrellas”, dado que todo grupo artístico que presentaba en su programa generalmente alcanzaban el estrellato o aumentaba su fama internacional. Por el programa de Sullivan pasaron estrellas de la música de talla mundial como The Beatles, The Rolling Stones, Elvis Presley, The Doors, Bill Haley & His Comets, Rocío Durcal, Elvis Presley, Carlos Santana y Bee Gees, entre otros.
1961. NUEVA GIRA, GRABACIONES Y TRÁNSITO HACIA UN CONCEPTO MUSICAL MÁS UNIVERSAL
La fama internacional que ganaron Los Hermanitos Ferreira después de su presentación en el programa de Ed Sullivan, no solo los cotizó en el mercado del espectáculo y amplió sustancialmente su proyección internacional, sino que nuevas casas discográficas internacionales se interesaron por grabar sus canciones.
Mientras el éxito crecía, los niños también iban creciendo en edad y en nuevas habilidades artísticas que, a su vez, ampliaban la capacidad de innovación del grupo. Richard, quien ya era un eximio acordeonista, comienza a tocar piano, acordeón cromático de botones y acordeón a piano; Álvaro, el bongosero, descubre sus excepcionales dotes para la ejecución de la guitarra eléctrica, Luis Carlos, el guarachero, comenzó a ejecutar el bajo en guitarra y el pequeño Néstor (Kico) se vuelve ducho en tocar la batería y, además, desarrolla sus habilidades como bailarín y cantante. Todos estos cambios abrieron el camino para nuevos conceptos musicales y unos shows internacionales cada más impactantes.
En 1961, la agrupación realiza una nueva gira por Ecuador, Perú, Chile, Panamá, Cuba, Guatemala, El Salvador, Honduras, México, Puerto Rico y Estados Unidos (SEECO, 1961). En su paso por México, graban un disco sencillo para el sello DIMSA que incluye el merengue La reina del monte de autoría de José Barros y el son chocoano Viniendo de raspadura, tal como se puede aprecias en la Imagen 13a. El son chocoano es un ritmo, que según José Portaccio, sigue la línea de son cubano (Tobón, Londoño y Zapata (2006:74).
Como se observa, en el álbum aparecen 12 piezas musicales, cuyos ritmos registrados en la contraportada, denotan cambios en el concepto musical y en la instrumentación. Aunque se mantienen algunas piezas en ritmos sabaneros predominantes en las grabaciones anteriores, en este álbum aparecen nuevas expresiones rítmicas caribeñas extranjeras como el Calipso trinitense (Trinidad y Tobago), la pachanga cubana, el son jarocho veracruzano (Veracruz, México) y el baión; los cuales amplían sustancialmente el peso de los ritmos antillanos sobre los sabaneros del Caribe colombiano.
El álbum incluye dos piezas registradas en ritmo de Rock que muestran el nuevo camino que estaba transitando la agrupación hacia la nueva ola musical que sacudía al continente americano y al mundo, de la mano del rock y el Rock and roll que, en la década de los años cincuenta, se había ido imponiendo desde Estados Unidos, llegando a la música de acordeón del Caribe colombiano a finales de la década, como se examina más adelante. Estas dos canciones en ritmo de rock permiten considerar a Los Hermanos Ferreira dentro de los pioneros del Rock colombiano.
En la música de acordeón, para 1961 ya Carlos Román y su Sonora Vallenata habían grabado con gran éxito, varios temas en ritmo de Rock and Roll, tales como Okey baby en 1957 y dos en 1958: La Nena y Very Very Well. Este último, con un gran impacto popular de largo plazo, al punto que todavía hoy suena en las fiestas privadas de las viejas generaciones. Aníbal Velásquez también había hecho lo propio, al grabar Rock con chachachá y Bailando Rock and Roll. Los Hermanos Ferreira se incorporan a este nuevo concepto musical en 1961, con dos canciones en ritmo de rock: Nena, nena y Vida come to me. En esta última, comienza a mostrarse la nueva faceta de uso del lenguaje inglés, que lentamente iría imponiéndose en las grabaciones como parte de la búsqueda de mercados y aceptación social más globales (Audio 10).
La cumbia interpretada en este
álbum es una versión de la clásica Cumbia
sampuesana del compositor Joaquín Betín, grabada originalmente por el
Conjunto Típico Vallenato en el año 1953 (Audio 11). El porro que
aparece en el LP se titula Porro flamenco (Audio 12). Entre las tres guarachas grabadas en el álbum, se destaca la titulada
Tu no me quieres na´ de autoría de
Richard, la misma que presentaron en el programa de Sullivan.
Este álbum tiene la particularidad de ser interpretado, según el análisis realizado por el maestro Ismael Rudas, con acordeón a piano, bongó, bajo y guacharaca, con la participación especial del cuatrista puertorriqueño Yomo Toro quien acompañó a la agrupación en la grabación de este álbum (Monsalve, 2021). Este último hecho ratifica por un lado, la influencia que desde sus inicios tuvo la música cubana sobre los Hermanitos Ferreira y, por otro, la transición que para este año estaba ocurriendo en el concepto musical de la agrupación.
Adicional al LP anterior, el sello SEECO incluyó una canción de Los Hermanos Ferreira en un álbum variado titulado Charanga (SCLP 9216), grabado con el objetivo de capitalizar la pachanga como el ritmo de moda de baile latino que se estaba imponiendo desde Cuba en toda América Latina. El álbum es un compendio de pachangas interpretadas por selectas agrupaciones nativas cubanas, tales como la Sonora Matancera, la Orquesta América del ´55, Estrellas cubanas y la agrupación colombiana Hermanos Ferreira (Imagen 14a). La canción de Los Hermanos Ferreira incluida en el álbum se titula El pachanguero, de autoría de Richard Ferreira (Audio 13). Esta interpretación ratifica la influencia que desde sus inicios tuvo sobre Richard Ferreira la música cubana.
En cuanto presentaciones en Colombia se destaca la actuación de Los Hermanitos Ferreira en la VII Feria de Manizales como quedó registrado en el Diario La Patria de Manizales en una de sus ediciones de enero de 1961 (Imagen 14b).
El proceso de transición de Los Hermanitos Ferreira hacia una música más universal documentado en el acápite anterior se observa de nuevo en el año 1962, cuando la agrupación incorpora nuevas sonoridades de gran aceptación popular en el mundo.
Hacia finales de los años cincuenta el Rock and roll ya estaba en decadencia, dado el rechazo generalizado a la impudicia de su baile y la cultura asociada; entonces apareció en 1960 un tipo de Rock and roll más recatado en su forma de bailar: el Twist, que hizo popular Chubby Checker con su canción The Twist, con la que se inició otra ola de danza frenética de la juventud. En 1962, rápidamente Los Hermanitos Ferreira, aprovechando una gira por Argentina graban en el sello TK de ese país un disco sencillo de 33 Revoluciones por Minuto que incluye por el lado A la canción Porro pachanguero, de autoría de José Barros y por el lado B la canción Twist de los Ferreyra de autoría de Los Hermanos Ferreira (o Ferreyra) como aparece en el marbete. Según el maestro Ismael Rudas en la interpretación de estas dos canciones se utiliza un acordeón a piano. En la Imagen 14c se muestran los marbetes de las dos caras de este disco y en el Audio 13a se pueden escuchar la interpretación del Twist de los Ferreyra. Imágenes y audio aportados generosamente por el Jefe Musical de la Radio Nacional de Colombia, Jaime Andrés Monsalve.
En este mismo año de 1962 la agrupación realiza una extensa gira en Chile, aprovechando el Campeonato Mundial de Futbol realizado en dicho país entre el 30 de mayo y el 17 de junio. Los Hermanitos Ferreira recorrieron el país durante nueve meses, siendo la gira más larga de la vida artística de la agrupación. En Chile tuvieron la oportunidad de compartir escenario con celebridades tales como Louis Armstrong y agrupación musicales famosas como Bill Haley and is Comets (Ferreira Pinto, 2024).
1963-1964. PRESENTACIONES EN COLOMBIA Y ESTABLECIMIENTO EN NUEVA YORK
En el primer semestre de 1963 Los Hermanitos Ferreira realizan
presentaciones en Bogotá y otros lugares del país. Una evidencia de ello son
avisos de prensa aparecidos en el diario El Tiempo en junio de 1963 donde se
publicita la “actuación especial de Los
Hermanitos Ferreira en el Country Club” (Imagen 15).
1965-1966. SIGUEN LAS PRESENTACIONES EN NUEVA YORK Y SE REALIZAN GRABACIONES CON EL SELLO DARO
Un día no determinado del año 1965, ocurrió un nuevo hecho trascendental para la vida artística de Los Hermanos Ferreira, quienes, para este año, con excepción de Néstor ya han habían dejado de ser niños, razón por la cual adoptan el nombre de Los Hermanos Ferreira. Richard ya había llegado a los 22 años, Luis Carlos a los 21, Álvaro a los 19 y Néstor a los 13. En unas de las presentaciones realizadas por el grupo en Nueva York, fueron observado por un prestigioso empresario de origen polaco quien había llegado a Santa Marta, Colombia, en el año 1930 con el nombre de Szymon Dawidowicz Fonsensky, el cual cambió por el de Simón Daro Dawidowicz en homenaje a Simón Bolívar por quien sentía una profunda admiración. Había iniciado actividades comerciales en Bogotá en los años treinta con un almacén de artículos musicales que lo llevó a crear en el año 1954 el sello discográfico DARO, acrónimo resultante de la unión de la primera sílaba de su apellido Dawidowicz y la primera del apellido de su esposa Sylvia Roth (Ramírez-Casas, 2021).
Simón Daro se emocionó mucho con el espectáculo de Los Hermanos Ferreira y al enterarse que eran colombianos los invitó a firmar un contrato de exclusividad para grabar varios LP. El primero, titulado Suzy Vendrá?. Los Hermanos Ferreira en Daro (Daro Dis 91.1157) prensado en diciembre del año 1965; el segundo, Colombia en Nueva York. Baile con Los Hermanos Ferreira (Daro Di 1160); el tercero, Los Ferreira a Go-go, (Daro Di 1163); el cuarto, Latinoamericanas favoritas al estilo de Los Hermanos Ferreira (Daro Dis 91.1164); y el quinto, Los internacionales; los cuatro últimos, prensados en el año 1966, tal como lo señalan los números seriales.
El lanzamiento del disco Suzy Vendrá?. Los Hermanos Ferreira en Daro fue
todo un acontecimiento. En el extenso texto que aparece en la contraportada del
álbum (Imagen 18) es notable la emoción de don Simón Daro con estos jóvenes colombianos,
cuya fama ya había trascendido el continente americano al incursionar en
Europa. En el primer párrafo del texto
aludido se lee:
“Especial encanto es el que tiene este disco. Es un regalo que hace DARO a las alegres muchachadas colombianas y europeas en estas vacaciones y para esta navidad de 1965. ¡Y qué regalo! Las voces, las canciones y las armonías de cuatro brillantes jóvenes colombianos que en estos precisos momentos son los ídolos de entusiastas multitudes en los Estados Unidos. Los HERMANOS FERREIRA, es el nombre que en este fin de año está en los labios de todos los muchachos y muchachas de las tres américas. Sus canciones son escuchadas con delirio, aplaudidas con furor, aprendidas, repetidas, cantadas con emoción, casi con locura, por todas partes, teatros, lugares de veraneo, televisión, radio; en la playa, en los salones, en los hogares, en fin, dondequiera”.
En otros apartes del texto se
hace referencia a las presentaciones de Los
Hermanos Ferreira en las bases militares norteamericanas, textualmente se lee: “se les llama con apremio, se les recibe con
delirio y se les retiene casi con angustia”, a tal punto que en ocasiones,
se afirma en el texto, los aviones que
los transportaban tuvieron que trastornar sus itinerarios “porque las gentes no se cansan de escucharlos, ni de admirarlos, ni de
aplaudirlos” y se cuenta, además, que en una de las bases militares “fueron despedidos a los acordes de la banda
de la base militar, mientras la multitud parecía enloquecer de entusiasmo”.
También se destaca en el texto de la contraportada en referencia, el profundo
amor de los jóvenes por su madre, que los llevó a suspender sus compromisos en
el día de acción de gracias y viajar 1.300 millas para estar junto a ella (DARO, 1965).
Este primer álbum de DARO con Los Hermanos Ferreira fue grabado en Nueva York, pero su lanzamiento se hizo en Bogotá, en cumplimiento de un deseo de los jóvenes. El acto de lanzamiento quedó registrado en el periódico El Tiempo en varios avisos aparecidos entre el 14 y el 17 de diciembre de 1965. Una de estas noticias es acompañada por una fotografía en la que se ve a los jóvenes con la nueva instrumentación que para la época utilizaban: acordeón cromático, bajo, guitarra eléctrica y batería (Imagen 19).
El concepto musical que se observa en los cinco LP grabados por Los Hermanos Ferreira en Nueva York con el sello DARO, marca una nueva etapa en la carrera artística de esta agrupación, bastante distante de sus orígenes sabaneros y cubanos. Se observa ahora una música muy conectada con los nuevos ritmos de rock y pop que venían desarrollándose desde la década de los cincuentas y que alcanzan un mayor esplendor a mediados de los sesenta, ligados a movimientos sociales de rebeldía y de cambio social y cultural que se expresaban en el movimiento Hippie y las expresiones populares en contra de la guerra que Estados Unidos libraba contra Vietnam. En este contexto de rebeldía y de cambio, los Hermanos Ferreira intentaron abarcar con los cinco discos producidos por el sello DARO, las nuevas manifestaciones musicales del continente americano y europeo, como se examina a continuación.
En el álbum Suzy Vendrá?. Los Hermanos Ferreira en Daro, cuyas portadas aparecen en la Imagen 18, se observa el predominio del género Pop rock. Apenas existen vestigios de los orígenes sabaneros en la canción “Cumbia sobre el mar”, de autoría de Rafael Mejía, que para 1965 ya tenía varias versiones grabadas por el Trío Serenata, Los Melódicos y Pacho Galán. La versión de Los Hermanos Ferreira tiene un corte moderno, enmarcado en ese nuevo concepto musical hacia que estaba transitando la agrupación; en la interpretación, apenas el sonido de la guacharaca es lo que queda de los instrumentos tradicionales de la cumbia sabanera tradicional.
El álbum Colombia en Nueva York (Imagen 20) se orienta al mercado colombiano dando primacía a versiones de ritmos tropicales, especialmente de canciones exitosas de Lucho Bermúdez y Pacho Galán que se entremezclan con composiciones propias; todas interpretadas con una instrumentación de las orquestas de la época (bajo, batería, guitarra eléctrica), sin dejar de utilizar el acordeón cromático.
El álbum Colombia en Nueva York, alcanzó una gran aceptación popular en Colombia a juzgar por el “Barómetro de popularidad” publicado en el diario El Tiempo en su edición del 12 de octubre de 1966, en el cual entre los diez discos más populares del año, Colombia en Nueva York ocupaba el quinto lugar, solo superado por Frank Sinatra, Marcos Gilke, la banda musical de la película la Novicia Rebelde y por Rolling Stones (Imagen 21).
El álbum Los Ferreira a go-go (Imagen 22) se orienta a los grupos juveniles de
la generación del Rock and Roll, el Go-go y el Twist de mediados de la década
de los sesenta; toda una cultura que buscaba emociones intensas y desafiaban
las normas de comportamientos moralmente aceptables; lo
cual se reflejaba en la formar de vestir, de peinar, maquillar y bailar
considerados impúdicos. Entre las canciones se destaca Niña a gogo (Audio 16).
En los álbumes Latinoamericanas favoritas al estilo de Los Hermanos Ferreira y Los internacionales (Imagen 23) se versionan piezas clásicas del cancionero latinoamericano e internacional, tales como el tango A media Luz, Mi cafetal, Yo vendo unos ojos negros, Toy contento, Recuerdos de Ipacarai, Perfidia, Moliendo café y Pachito e ché. En el Audio 17 se puede escuchar la versión de Los Hermanos Ferreira de esta última canción.
En este mismo año de 1966 el sello DARO con el patrocinio de la empresa Goodyear realiza una reedición del álbum Latinoamericanas favoritas, con el título "Edición selecta".
1969-1975. ÚLTIMO LP GRABADO Y FINAL DEL GRUPO
En el año 1969, los Hermanos Ferreira
profundizan su estilo Pop rock y lo llevan al más alto nivel interpretativo y
comunicativo en el álbum Lets Make Love
(Imagen 24). En
dicho álbum dejan de llamarse Los
Hermanos Ferreira para denominarse The
Ferrarri Brothers, como se observa en las portadas del álbum, decisión tomada para facilitar la pronunciación del nombre de la agrupación en el mundo de habla inglesa. El cambio de nombre al idioma inglés denota también la universalización a la que había llegado la agrupación, cuya mira era ahora el mercado europeo y del Norte de África. De hecho el canto en español en este
álbum se reduce a solo dos canciones y se introducen cambios importantes en la
instrumentación de la banda. La contraportada que se muestra tiene una dedicatoria firmada por Richard el 20 de diciembre de 1969. Este álbum fue autofinanciado por la agrupación y solo se vendía en los conciertos.
Según el texto que aparece en la contraportada, para esta época los Hermanos Ferreira cantaban en cinco idiomas diferentes: italiano, español, inglés, hebreo y francés y su instrumentación, la integraban un acordeón cromático de 120 bajos, piano, órgano, órgano eléctrico, guitarra, bandurria, batería, trompeta, saxo, congas, bongós y bajo, entre otros (Imagen 25). En la interpretación de las canciones de este álbum, es claro estilo similar al de los Beatles, agrupación que seguramente Los Hermanos Ferreira querían emular; incluso aparece entre las canciones una versión de la clásica canción de The Beatles Yesterday (Audio 18).
El título del álbum, por su parte, que traducido es Hagamos el amor, evidencia la sintonía del grupo con las corrientes libertarias de los jóvenes de finales de los años sesenta que proclamaban el destape social, cultural, político y moral a través de la “Toma de Palabra” sintetizadas en varias consignas entre las que se destaca Prohibido prohibir. Asimismo, el rechazo a la guerra del Vietnam también se sintetizó en la consigna “Make love not war” (Hagamos el amor, no la guerra). La expresión “hagamos el amor” expresaba, a finales de los sesenta, el deseo de los jóvenes por la práctica del amor libre.
En el año 1969, la agrupación realiza una gira por Europa y el norte de África, presentándose en España, Portugal, Cannes francés, Groenlandia, Casablanca (Marruecos) y Dakar (Senegal), entre otros (Imagen 26). Después de dicha gira Álvaro se retira del grupo seducido por una joven sueca con la que contrajo matrimonio en el año 1970, residenciándose desde entonces en Suecia. Como consecuencia, se integran al grupo los dos hermanos menores: William ejecutando la guitarra eléctrica y Édgard la batería. Diana, la hermana menor, nunca hizo parte de la agrupación (Ferreira Pinto, 2024).
BIBLIOGRAFÍA
DARO (1965), Suzy Vendrá?. Los Hermanos Ferreira en DARO, LP DI 1152. New York.
Ferreira Pinto, Álvaro (2018) Regalo para el mundo, de los hermanos Ferreira - 1960 -, documento biografíco de la familia Ferreira, disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=jIJx2p5Z5So
Ferreira Pinto, Álvaro. Página de Facebook.
Ferreira Pinto, Álvaro. Canal de Youtube.
Ferreira Pinto, Álvaro (2024). Comunicaciones por correo electrónico.
Monsalve Jaime Andrés (2021), “El ruido y las nueces: Unos Beatles que no fueron”, en El malpensante, edición 224, de enero 27 de 2021.
Periódico Pantalla (1959), Periódico semanal, edición del viernes 22 de Mayo, página 10. Medellín.
Ramírez-Casas, Orlando (2021) “Discos Daro, de don Simón Daro Dawidowicz”, en: Postigo de Orcasas, Blog personal.
SEECO (1961), Presentando los Famosos Hermanos Ferreira, SCLP 9211. New York.
Sonolux (1960), Cumbia del mar, Disco de larga duración, LP 12-152. Industria electrosonora LTDA.
Tobón, Alejandro; Londoño María Eugenia; Zapata, Jesús (2006) Entre sones y abozaos. Universidad de Antioquia.
ANEXO
1. LIBROS IMPRESOS
*Poesía romántica en el canto vallenato. Rosendo Romero el poeta del camino
*Elegías vallenatas. Poesía lírica de lamento en el canto vallenato
2. LIBROS-BLOG
*Adrián Pablo Villamizar Zapata. Vida y obra de un trovador vallenato y Caribe
*Aníbal Velásquez. Obra discográfica del mago del acordeón
*Canción La gota fría. Catálogo y análisis de versiones producidas en el mundo
*Ismael Rudas Mieles. Vida y obra de un ícono de la música vallenata
*Julio de la Ossa. Vida y obra de un gigante del acordeón
*La hamaca grande. Versiones grabadas
*Las notas de Toño Daza. Una enciclopedia vallenata
3. ENSAYOS / ARTÍCULOS
*Diversidad y riqueza de estilos en la música vallenata: Aproximación geográfica cultural
*Poesía lírica romántica en el cancionero vallenato de Fernando Meneses
*Geosímbolos en la música vallenata y caribeña colombiana
*Diversidad y riqueza rítmica de la música de acordeón del Caribe colombiano
*Rosendo Romero Ospino, El poeta del Camino
*Joaquín Rodríguez: Joaquín de las aguas / El cantor del Sinú / El cantaversos
*Coleccionismo, investigación y memoria histórico-musical de los pueblos
*El sol en la cosmovisión y la poética de Juancho Polo
*El ideario vallenato de Ismael Rudas Mieles
4. ANÁLISIS DISCOGRÁFICO Y DE CANCIONES
*Inicio de la producción fonográfica de música tropical del Caribe colombiano
*Aníbal Velásquez. El polifacético, versátil y revolucionario de la música vallenata y tropical colombiana
*Ganadería y arrieros en la música tropical colombiana de la primera mitad del siglo XX
*La amistad en la música de acordeón tradicional. Alejandro Durán y Lucho Campillo
*Alejandro Durán y Alberto Anaya: Corredurías, compadrazgo, conduerma y lecciones
*Nacimiento de la discografía sinuana.
*Primera grabación fonográfica del porro María Varilla
*Introducción del bombardino en la música de acordeón del Caribe colombiano
*Emilio Oviedo: el acordeonero con mayor número de cantantes en la historia del vallenato
*Música vallenata: Rafael Escalona Martínez como cantante
*Canciones vallenatas interpretadas en lengua indígena
No hay comentarios.:
Publicar un comentario